Adriana Villagra fue galardonada en el 2020 con el Premio a la Trayectoria Profesional en Artes Visuales otorgado por la Gran Gala de la Construcción, edición XXIII, organizado por Paraguay Eventos & Emprendimientos.

Toda carrera se construye partiendo de un proyecto, una planificación y el necesario talento para sentar las bases en compactos pilares que marcan la senda del éxito. Este accionar en Adriana Villagra puede definirse como una sólida formación profesional que se inicia con su carrera universitaria siendo Licenciada en Diseño Gráfico con Honores por la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción”.

Esta formación le permitió establecer una sintonía muy singular en el “entendimiento de una comunicación con un lenguaje visual propio; comprender el proceso de la comunicación visual y la sintaxis de la imagen”, en medio de colores, formas y sentidos que permitieron poner las bases estructurales adecuadas para el siguiente paso que fue interiorizarse profundamente de aquello que la apasionaba por sobre todas las cosas: el Arte, que lo define en tres palabras “práctica, comunicación y autoconocimiento”.

Ya en su niñez Adriana establecía su primer contacto con el dibujo. “Nací dibujando…” relata en el documental “Adriana Villagra; Voy a Seguir Creando”, realizado en el 2016 celebrando los 10 años de su trayectoria. En la artista nada es improvisado, todo requiere un estudio pormenorizado, estableciendo un vínculo singular con la técnica del óleo, indisoluble en el tiempo.

A través de su madre, la artista Ramona Riquelme a quien ella reconoce como su mentora, ha conocido ampliamente los secretos del oficio creativo. “Mi mamá es una gran pintora y dibujante…” le contesta a Karina Mazzocco y Luis Muchut en su programa que sale para todo el mundo desde Buenos Aires en COLORAL TV durante una entrevista en el año 2020. “Esa sensibilidad profunda, ese espíritu humanista…mi gran maestra en el arte…”

A partir del 2002 ADRIANA VILLAGRA se ha presentado en diversos concursos obteniendo premios entre los cuales se destaca especialmente el 1er. Premio otorgado en el 2º Concurso Juvenil de Pintura organizado por el Centro Cultural Paraguayo Americano (CCPA) y Amigos del Arte en el 2005. Ese mismo año presenta su primera muestra individual superando su “pánico escénico” por la necesidad de compartir su arte con la gente. La exitosa exposición llevó el nombre de “Alquimia”, tal vez una forma inconsciente de traslucir su futuro artístico porque fue desde ese momento hasta la actualidad una forma imparable de brillar en sus creaciones de alto nivel.

Siguieron desde ese año hasta el presente exposiciones individuales e innumerables participaciones en exposiciones colectivas locales e internacionales. Las exposiciones internacionales le permitieron ganar experiencia con artistas de otros niveles, expandir la mente y tener más apertura para vivir nuevas experiencias. Entre estas exposiciones internacionales se destacan: Arteclásica (Buenos Aires, Argentina); Culturar Habana (Cuba); Bienal de Chapingo (México); Harris Gallery (Houston, EE.UU.) y más recientemente la Feria Art Revolution Taipei en el 2018 y en el 2020 en forma virtual con Galería ArteLibre (Zaragoza, España). También es importante destacar su experiencia como becaria del programa IGE (Intercambio de Grupos de Estudios) de la Fundación Rotary International en Pittsburgh, Estados Unidos en el 2013.

Su fino manejo de la papiroflexia (origami), con las ancestrales figuras de papel reconvertidas en el paisaje de su hermosa tierra, Paraguay, encuentra un sello de su arte creativo que la hace distinguir. No en vano ha entrado en España siendo invitada desde el año 2014 en las publicaciones dedicadas a difundir el realismo contemporáneo internacional como la “Guía Leonardo” y “Arte y Libertad” editadas por la Galería ArteLibre bajo la dirección de José Enrique González y además de otras publicaciones especializadas como la revista Ophelia de Argentina bajo dirección de la Lic. Camila Reveco, quien también la ha entrevistado en las redes sociales de la publicación.

“La sensibilidad de la Artista recoge el eco y la vibración de las cosas que pasan y le pasan…”. Carlos Sosa, Crítico de arte. Exposición Individual “Emociones Místicas”, Galería Agustín Barrios, Centro Cultural Paraguayo Americano (CCPA), 2012.

Sin lugar a dudas marca un lugar de suma importancia para el Paraguay la participación de Adriana Villagra en el concurso International Artist Grand Prize Competition organizado por la feria Art Revolution Taipei donde entre más de 4000 obras de artistas del mundo la suya es seleccionada como finalista en una selecta lista de 20 artistas y es premiada con un stand individual para exponer en la feria celebrada en el World Trade Center de Taipei en el 2018 compartiendo con cerca de 300 artistas de todo el mundo. Su presencia en esa feria, gracias al apoyo del Fondec, fue un momento significativo para ella donde vivió una anécdota muy especial que la recuerda con mucha emoción: “Una joven taiwanesa se acercó al stand donde exponía mis cuadros y se quedó especialmente fascinada con uno titulado: “Inteligencia Iluminada”. Ella miraba detenidamente con fruición…, luego, tímidamente en inglés me preguntó su significado y le dije entre otras cosas, que simbolizaba la libertad del espíritu. Ella se emocionó con lágrimas en los ojos, se conectó plenamente con la obra y cada vez que volvía la vista hacia ella se quebraba; se sintió reflejada”. En ese momento, Adriana comprendió la tal mentada frase de que “el arte no tiene fronteras” y que especialmente su arte había logrado el soñado cometido de traspasar las nacionalidades y depositarse en un corazón que lo supo ver a miles de kilómetros de su país.

“…Adriana Villagra nos somete al desafío de la condición humana. Su refinada labor es un canto de realidad optimista. En él no existe adversidad que no pueda iluminarse.” Roberto Manzanal, Curador de la exposición individual “La Bella Ilusión Persistente”, Centro Cultural Citibank, 2017.

Esta merecida distinción otorgada por la Gran Gala de la Construcción permite conocer aún más al ser humano que está detrás de esos cielos que permiten soñar con vuelos imaginarios, detenerse en un pétalo y tal vez lanzarse a jugar con esos coloridos papeles plegados en un cuadro que “nos mira” apasionado desde una pared… Premios así son necesarios para seguir obrando con nuevos ímpetus que señalan el camino correcto en una trayectoria, como bien lo expresa Adriana Villagra: “Recibir este premio fue algo sorpresivo e inesperado pero creo que es la consecuencia de ser consecuente; de venir desarrollando un trabajo perseverante, es como un premio a la constancia y a la entrega…es el regalo que llega cuando uno hace las cosas en forma sostenida, auténtica y con entrega, desinteresadamente. Lo vivo con un inmenso sentimiento de gratitud”.